En la siguiente escena la pareja protagonista pernocta en un hotel que se me ha hecho imposible de identificar. De ahí que hasta ahora he hablado del trayecto como si hipotéticamente sucediera durante una jornada, ya que el único corte propiamente dicho que lo indique sucede aquí. Sin embargo, el amanecer del siguiente día sucede en Cangas de Onís, que sería lo mismo que decir, a una hora de distancia de Gijón según las condiciones actuales.
El emblemático Puente Romano de Cangas de Onís

Ahí sigue sobre el río Sella tras siete siglos, pues a pesar de llamara “romano”, realmente es de origen medieval (siglosXIII- XIV). En 1939 se le añadió la gran cruz colgante: La Cruz de la Victoria, que es el símbolo de la bandera de Asturias. Si nos fijamos apreciaremos una diferencia: la omega es minúscula (ω) en lugar de la mayúscula (Ω) filmada en 1981. Resulta que la original de 1939 mantenía la tradición de llevar la Alfa en mayúscula y la Omega en minúscula. Hace décadas la cruz apareció arrancada en el fondo del río Sella y a su sustituta se le puso la Omega en mayúscula, que es la que aparece en la película. Más recientemente, en septiembre de 2021 durante la Vuelta Ciclista a España volvió a aparecer una mañana víctima del vandalismo, colgada únicamente de una de sus cadenas. Aprovechando su reparación, volvió a recuperar la omega minúscula.

De ahí pasan a Covadonga, siendo la primera imagen que aparece una vista cenital de la Fuente del Matrimonio y el “chorrón” (cascada que surge de debajo de la cueva).

El entorno permanece invariable. Dependiendo de la época, el “chorrón” puede ser más o menos abundante, siendo espectacular en momentos de deshielo o fuertes lluvias. La Fuente del Matrimonio, también llamada de los siete caños, es foco de una leyenda ancestral que afirma que aquel o aquella que beba de cada una de sus caños al cabo de un año encontrará el amor o el matrimonio.

La Basílica de Covadonga (1901) al fondo sobre el Cerro del Cueto. Nuevamente existe un error de continuidad, pues la fuente de la escena anterior se encuentra tan sólo a unos metros de esta basílica.

No conseguí localizar ni la carretera ni el punto exacto donde se tomó la escena. En su lugar decidí escoger estas dos tomas a título ilustrativo.


Vista de la Basílica de Santa María la Real de Covadonga tomada desde la Santa Cueva.

El 15 de febrero de 2021 ardía el monte Priena en un pavoroso y espectacular incendio que arrasó 120 hectáreas de vegetación e hizo temer que alcanzara al Real Sitio pero poco faltó si no llega a ser por los esfuerzos coordinados de varias brigadas de bomberos. Un año después, justo cuando tomé esta fotografía, aún se aprecian sus cicatrices.

Entrada a la Santa Cueva

Parece que la verja, además de perder sus velas, ahora presenta un suplemento de forja que la eleva en altura.

Vista general de la Santa Cueva

A día de hoy sigue siendo un centro obligatorio de peregrinación, tanto para creyentes como para ateos/agnósticos. Y es que es una de esas singularidades que tenemos los asturianos y que es difícil de explicar.

La Virgen de Covadonga, apodada cariñosamente como “La Santina” es la patrona del Principado de Asturias. Aquí luce el manto rojo con bordados dorados, que es su imagen más característica.

Sin embargo durante nuestra visita presentaba un manto rosáceo. La virgen realmente tiene un ajuar con más de 50 vestimentas que se cambian periódicamente debido a las condiciones de humedad del entorno. En Semana Santa y Día de Difuntos se viste de negro en señal de luto. Por ese motivo, tampoco estaríamos ante la talla del siglo XVI (la original del siglo XII se perdió durante un incendio en 1777), si no ante una reproducción realizada en madera y poliéster de 1970. El ángulo de mi toma es diferente a la película debido a que en ese momento había público dedicado al rezo y no quise interponerme.

Tras esta visita, el film continúa con Antonio Ferrandis solitariamente paseando de nuevo por Gijón. Puede observarse la base de una bandera sobre un pilar de hormigón. En época estival toda la playa estaba flanqueada por banderas de todos los países.

En 1993 el paseo de la Playa de San Lorenzo se remodeló, adquiriendo gran parte del aspecto actual. Destacó la colocación de farolas de diseño clásico y personalizado donde antaño había banderas. Hasta un total de más de 170 farolas iluminan ahora el paseo de El Muro.

Tras ver un partido de futbol entre el Sporting y el Atlético de Madrid junto con su amigo interpretado por el genial José Bódalo y el resto de directiva de ambos equipos, fumándose unos buenos puros (fue un partido real celebrado el 18 de octubre de 1981 que se saldó con la victoria del equipo local con un 3 a 2), toca un momento final de reflexión interior en el hall del Hotel Asturias antes de la partida al aeropuerto rumbo a California. Al anochecer, se despide de Bódalo y se sube a un taxi. En este caso, un SEAT 131 del entonces recién estrenado color blanco que se ha mantenido hasta ahora (desde febrero 1980).


Hasta aquí todo el trabajo fotográfico que he podido hacer durante mi tiempo libre a lo largo del pasado mes de febrero y parte de marzo. Algunas escenas no he podido plasmarlas debido a no encontrar la localización exacta o no darse las condiciones climatológicas adecuadas. Sin embargo, puede decirse que ha conseguido plasmar prácticamente todos los exteriores de la oscarizada obra de José Luis Garci como mejor he podido (soy un total amateur autodidacta con un equipo básico). Este proyecto no lo doy aún por finalizado, pues pretendo repetir algunos planos que no me han resultado del todo satisfactorios y conseguir aquellos que se me han escapado.
La película, en su día, nos presentó un Gijón y una Asturias que aún no eran tan conocidas en el resto de España. Tu recorrido, 40 años después, nos muestra lo que fuimos y lo que somos… los edificios siguen, la gente cambia, el paisaje evoluciona… una visión apasionante de la ciudad, su metamorfosis urbana y su relación con el resto de Asturias.
Me gustaMe gusta
Muchas gracias! Era justo lo que pretendía
Me gustaMe gusta