¡Menudo descubrimiento! Hace unos pocos posts os presentaba el mini compresor portátil de Mannesmann como una buena compra (https://beetleinjection.home.blog/2020/11/21/un-practico-compresor-portatil/) por su rendimiento y practicidad. Sin embargo en vehículos carentes de toma de 12V y cuya batería se encuentra bajo el asiento trasero u otra ubicación a desmano, caso de mi VW Escarabajo, resulta un poco engorroso. Mi idea inical de conectarlo a una powerbank/booster no dio resultado por tener ésta la toma de 12V limitada a 8A (lo mínimo hubiera sido 20A). A pesar de esto, como herramienta para hinchado de ruedas es sencillamente perfecta para cualquier aficionado y no me arrepiento de su compra. Aunque otro de los peros es que su manómetro analógico no goza de exactitud. Así pues, dio la casualidad que semanas más tarde descubriera a través de un foro la existencia de una bomba eléctrica de hinchado de la marca XIAOMI. Sí, una marca china que asociamos a teléfonos móviles y patinetes eléctricos. Pero es que realmente este fabricante tiene una gama más amplia de electrodomésticos. Tras leer varias reseñas en la red me decidí por adquirir uno de estos mini-compresores por poco más de 35 €.

El tamaño es claramente compacto, para hacerse una idea como un móvil aunque bastante más grueso. El peso se queda en menos de 440 g. Viene en una funda textil (quizás se eche de menos una funda rígida en su lugar) junto con dos adaptadores de hinchado (aguja para balones y válvulas Presta) y un cable USB de recarga. Llama la sencillez de su diseño, que recuerda a un Ipod.

El aparato tiene 5 modos de funcionamiento que se seleccionan presionando la derecha de la rueda: libre, bicicleta, moto, coche y balón. Salvo el primero, cada modo tiene unos límites mínimos y máximos de presiones. Sinceramente no le veo mucho sentido como veremos más adelante en mi caso particular…
En el momento en que se despliega la manguera el aparato se enciende. . La toma es enroscable, algo que ya habíamos comentado en el post del compresor Mannsemann que no suele ser del gusto de todos. Al conectarlo en la válvula del neumático nos dirá la presión de éste. Además hice la compración con un manómetro digital y las lecturas eran idénticas. Así que también lo podemos usar como simple manómetro para comprobar presiones periódicamente. Una vez seleccionado el modo podemos programamos la presión

De nuevo la rueda de repuesto sirvió de conejillo de indias. Una prueba tan sencilla como ver cuánto tarda en pasar de 2.0 bares iniciales hasta 2.5 bares finales…

Programamos la presión a final a esos 2.5 bares pulsando en el + o – , enroscamos en la válvula y pulsamos el botón central. Ya sólo sería esperar a que la propia bomba pare automáticamente en el momento en que alcance dicha presión.

Como se puede ver, cronometré dicha labor : 3 minutos 5 segundos. Sorprendente teniendo en cuenta tamaño y precio de este compresor. Con poco ruido y vibraciones, sólo la manguera se calentó ligeramente. Si hacemos la comparación, el Mannesmann, que es un compresor «de verdad» lo hace en menos de 1 minuto.

También hice la prueba de ajuste de presiones en ruedas tanto del Escarabajo como de la furgoneta. Subir esa típica décima le llevó unos 45 segundos.
Así que tenemos un producto que ofrece muchas ventajas; es compacto, no dependes de cables de alimentación durante su uso, es relativamente veloz y su manómetro es preciso. Posiblemente estemos ante una de las mejores herramientas de mantenimiento que podamos llevar en nuestro coche o moto a un precio ajustado. ¡Ah! y también tiene una pequeña luz a modo de linterna.
Obviamente…nadie es perfecto. Y aquí viene lo único que no me gustó. No se pueden programar en otras unidades y en bares, que es a lo que estamos acostumbrados en la Europa continental, sólo está disponible para los modos «moto» y «coche». Para el resto viene en PSI (libras/pulgadas cuadrada). Y es aquí cuando se nos presenta esa pequeña particularidad que afecta a determinados coches antiguos como es mi caso. Tanto en modo coche o modo moto la presión mínima que deja programar está fijada en 1.8 bar. ¿Qué pasa por ejemplo en un Volkswagen Typ 1 Escarabajo? Pues que el eje delantero tiene una presión recomendada de sólo 1.3 bar. Incluso para neumáticos diagonales se recomiendan unos bajísimos 1.1 bar.

La solución es bien sencilla y si lo analizamos no es ningún problema, tan sólo es un ejemplo de lo que significan algunos pequeños detalles que para el resto de usuarios no afecta. En este caso habría que elegir el modo «libre», el cual presenta unos límites prácticamente indefinidos que, tal como había comentado previamente, emplea las PSI como unidad. Es cuestión de hacer la conversión de nuestros habituales bares a PSI . Ya que como ahora por suerte disponemos de móviles con conexión a internet para buscar conversores de unidades ¿donde está el problema?. Tan sólo eso es el único «pero» que le pongo a este pequeño compresor.
